TÉ MATCHA Y OTROS INGREDIENTES ORIENTALES DETOX

Enero es el mes de las dietas detox o, como mínimo, de volver a la alimentación saludable. Es el momento de olvidar los excesos y de comer más frutas y verduras, pero eso no significa repetir cada día un menú aburrido. En UDON te queremos ayudar con algunos ingredientes orientales que, cuando los pruebes, te enamorarán: 

Té matcha

Se cree que este té verde en polvo protege el sistema inmune y ayuda a controlar los niveles de glucosa y colesterol. Se consume desde hace más de 800 años y parece que los primeros en aprovechar sus propiedades fueron los samuráis y los monjes budistas. Pero hoy hay miles de fans del matcha, que se obtiene moliendo los primeros brotes de las hojas de té, de color verde intenso. En Japón, estas hojas se escaldan y se secan para mantener su color y dulzor. Cuando lo disolvemos en agua, se obtiene un líquido verde intenso con un delicioso sabor y aroma. Para prepararlo como un auténtico japonés, debes mezclarlo con agua caliente (sin que llegue a hervir) en un bol (chashaku) con un batidor de bambú (chasen).

Aunque tradicionalmente se tome como bebida, el té matcha es un versátil ingrediente para cocinar. Si lo combinas con chocolate blanco o con leche, el sabor láctico y cremoso equilibra el amargor del té. Por eso, en combinaciones como ganaches, mousses, cremas inglesas y natillas, el té matcha aporta un sabor herbáceo característico y un color verde intenso. El tiramisú o el cheesecake de té matcha son dos deliciosos ejemplos. También combina con licuados y bebidas vegetales cremosas (almendra, coco, horchata, etc) y, en platos salados, aportará un aroma herbáceo ideal en mayonesas o salsas de yogur.  

Miso

Se trata de una pasta de soja fermentada con sal. El más popular, el kome miso, se elabora a partir de judías de soja hervidas y mezcladas con un cultivo de levaduras (koji) provenientes del arroz. Después se le añade sal y se deja madurar entre 6 meses y 3 años. El miso es un gran aliado en la cocina, pero el plato más conocido, y que la mayoría de japoneses consumen para empezar el día, es la sopa de miso. Se elabora a partir de dashi y miso con dados de tofu hervido, negi y alga wakame y es una gran opción para eliminar toxinas. Ayuda a regular los niveles de colesterol y tiene propiedades antioxidantes.

Shiitake

Contiene mucha fibra y vitaminas del grupo B y ayuda a eliminar grasa y colesterol. Pero además, la seta shiitake, la más famosa de Japón, es un ingrediente sabroso. Aporta un sabor umami intenso, un aroma a madera y una textura suculenta y gelatinosa que la convierten en un elemento versátil tanto en la cocina oriental como en la occidental. Combina bien con la mayoría de ingredientes y lo encontramos en múltiples platos tradicionales japoneses de verduras, salteados de noodles tipo yakisoba, carne, shabu shabu o sukiyaki. 

Wakame

Es una de las algas comestibles más beneficiosas para la salud por su contenido en calcio, magnesio y hierro. Contiene 1.300 miligramos de calcio por 100 gramos de alga, unas once veces más que medio vaso de leche. Además, son ricas en magnesio y, en cuanto al hierro,  100 gramos de alga wakame contienen 25 miligramos de hierro, una cifra muy superior a la carne roja. Se puede consumir fresca, deshidrata o en salazón. 


Para saber más de los miles de ingredientes orientales y cómo cocinarlos, puedes recurrir a La Despensa Japonesa, un libro de UDON Asian Food y Fundació Alícia para compartir nuestro conocimiento sobre cocina asiática y su adaptación a los gustos occidentales. Un manual con los cien ingredientes más representativos de la cocina nipona y sus maridajes. Si eres asianfoodlover pero la cocina no es lo tuyo, siempre puedes consultar nuestra carta, donde encontrarás sopas miso y platos con awakame y shiitake entre muchos otros ingredientes saludables.